El puerto de Candás ha sido objeto de numerosas obras, reconstrucciones y ampliaciones sucesivas, principalmente a partir del siglo XVIII. A principios de la década de 1950, una de las últimas obras realizadas en el puerto fue la ampliación del dique de abrigo y, como consecuencia de esta ampliación, las corrientes se modificaron haciendo que una gran cantidad de arena flotara en el puerto, perdiendo gradualmente el calado del puerto hasta llegar a su estado actual. Aquí puedes ver “dos barcos de piedra”, que fueron traídos de Inglaterra cuando perdieron su utilidad a principios de la década de 1930. Uno de ellos, llamado GRETEFORCE, se utilizó como rompeolas y el otro, el GRATEFARM, pasó a formar parte del propio muelle.